Cristina, entre Boudou y... ¿quién?

Siendo año de elecciones presidenciales, la incertidumbre sobre quién acompañará a Cristina en su fórmula es enorme. Nadie dice nada, todo son meras suposiciones o expresiones de deseo, dependiendo del caso. De lo que no hay duda, algo que hasta hace relativamente muy poco se dudaba, es que Cristina Fernández de Kirchner irá por la reelección. 

Pero reitero la pregunta: ¿Quién será candidato a vicepresidente? Nadie lo sabe, ni siquiera los ministros que la siguen a donde quiera que vaya. Por lo menos la mayoría de ellos está en la misma oscuridad en la que nos encontramos los integrantes del pueblo argentino. Por desgracia, ya corre por ahí esa "sensación" que dice que Cristina va a ganar, ya sea en primera vuelta o en ballotage, la presidenta volvería a dar el batacazo. Las encuestas dicen que su imagen positiva está cerca de los 60 puntos. ¡60 puntos es una barbaridad! ¡Argentinos, hago un llamado urgente a la reflexión! Y además si Cristina se mantiene en la Casa de Gobierno, circuló una versión que dice que podría querer extender su mandato... no creo que esto sea así, pero no sería raro ya que la historia ha demostrado muchas veces que a la gente poderosa se le sube el poder a la cabeza. Tomemos la figura de Hugo Chávez por ejemplo, que está al frente de Venezuela desde 1999, una locura. 

Otro problema que compete a este tema, y que le facilita el trabajo a Cristina (o como la llama una ex profesora de historia mía: "Barbie") es la falta de unión en la oposición. Si la oposición se aliara con una causa común, seguro que la situación sería totalmente diferente. Sin embargo, como siempre en la política (y más en la actual), no importa tanto la ideología sino los intereses propios. Ya ven que se popularizó el término de "panqueques". Cobos, uno de ellos, aunque como perjudica al kirchnerismo... está todo bien con vos Cleto.  

Acabo de darme cuenta que me fui de tema... y bue, este es mi blog así que no me preocupa, hablar de política me pone así...

Retomando con la figura del vicepresidente en potencia. Haciendo referencia al acompañante de fórmula, una fuente del Gobierno para el diario Perfil dijo: "Debe ser alguien bien leal para evitar el síndrome Cobos y, fundamentalmente, de bajo perfil para que no comience a operar para 2015 apenas asuma". A partir de esto, dicen, el que tiene la ventaja es el secretario de Comunicación Pública, Juan Manuel Abal Medina, hombre de perfil bajo y kirchnerista con todas las letras del abecedario. No obstante, en esta puja también se encuentra el ministro de Economía, Amado Boudou. Este último también escaló posiciones en la tabla preferencial al quedarse afuera de la fórmula para gobernar la ciudad de Buenos Aires (que finalmente quedó formada por Daniel Filmus - Carlos Tomada), porque supuestamente Amado genera más confianza a la presidenta para que esta lo quiera a su lado en la batalla por las elecciones presidenciales.

Hablando de Boudou, otro personaje. Contradictorio con lo que dice. A finales de marzo, el ministro le dijo a Jorge Rial (por radio La Red AM 910, en el programa Ciudad GótiK): "Tengo mucho trabajo, no pienso en otra cosa. Yo acompaño a la presidenta solo como ministro de Economía" [...] "Ahora tenemos la precandidatura a jefe de gobierno porteño y estamos trabajando para llevarle a la gente una propuesta que sea superadora a la actual". Habiendo dicho esto, ahora tiene toda la intención de ser vicepresidente... ¡Ay, Boudou!

Sinceramente, no sé cómo va a terminar este malambo. Todavía no sé a quién voy a votar. Por lo pronto este dilema cristinesco lo resolverá la propia presidenta cuando lance su candidatura, hay dos fechas probables: o el 10 de junio, o el 23. Sigamos con la incertidumbre.