De la infancia y el nazismo

Un alumno estudioso y aplicado de la secundaria descubre que uno de sus vecinos, un jubilado cualquiera, fue un peligroso oficial Nazi. Su pasión de libro por la Segunda Guerra Mundial lo llevará a sumergirse en una relación tormentosa que será su perdición.           

Apt pupil, o más conocida en español como El aprendiz o Alumno aventajado es una novela de Stephen King, editada por primera vez en 1982, dentro de una colección de cuatro novelas llamada Las cuatro estaciones.

            Esta obra, que puede ser encasillada en el género de terror psicológico, describe la relación entre un joven intrépido, Todd Bowden, y un anciano inmigrante alemán, Arthur Denker. Con el correr de los 29 capítulos se desvela la verdadera identidad de uno de los protagonistas: Kurt Dussander, un Nazi que solía regentear un campo de concentración. King logra, de esta manera, demostrar con una gran habilidad cómo dos personas pueden transformarse radicalmente en monstruos llenos de morbosidad, oscuridad y sadismo, y gracias a eso, llegar al extremo de depender cada uno del otro.  

La película, basada en la historia,
fue realizada en 1998.

            Una vez más, Stephen King, popularmente conocido como “el maestro del terror” y cuyo nombre sonó para el premio Nobel de literatura del año pasado, prueba que no solamente puede entrar a la lista de los más vendidos con historias sobrenaturales sangrientas como Cell, It, o El misterio de Salem’s Lot; El aprendiz refleja un dominio absoluto de las palabras y de la imaginación, haciendo que el lector quiera pasar las páginas casi más rápido de lo que le permiten sus ojos.

            Además del ritmo frenético de lectura al que obliga King en la mayoría de sus libros, existen ciertos detalles en la obra que nos compete en esta ocasión que también tienen su sello característico. Por un lado, las sorpresas con las que es probable encontrarse en nimios detalles: por ejemplo, que el nombre Todd tenga un significado oscuro en alemán (tod significa muerte) y que, quizás por eso, Dussander jamás llame al niño por su nombre en la novela. Y en segundo lugar, la recurrente referencia que hace a personajes de sus obras anteriores. “Dufresne era su nombre – lo recuerdo porque suena un poco parecido al mío. Parece que no era tan inteligente para matar esposas como lo era eligiendo acciones en la bolsa. El crimen pasional, chico. Solo prueba que todos los hombres no son más que burros que pueden leer”, dice Dussander en una parte de la obra. Andy Dufresne es uno de los personajes principales en la novela que antecede a El aprendiz en la colección, un banquero que va preso injustamente por un crimen que no cometió en La redención de Shawshank.

            Este relato, que se encuentra en ese limbo entre lo que se establece como historia corta y novela, no es el máximo exponente de Stephen King. Pero de todas maneras logra transmitir de la mejor forma cada variación en los pensamientos de los personajes. Permite seguir cronológicamente y con lujo de detalles la evolución de un niño que se cree lo suficientemente capaz para chantajear a un oficial Nazi. Y todo lo que eso conlleva.

            Es una obra que consigue entretener y dejar sediento al lector por saber cuál es el desenlace, por más que para lograrlo tenga que enfrentarse a situaciones perversas y de lo más sádicas. En fin, alcanza ese objetivo que hace a toda buena historia: mantener al lector enganchado, atento y con los ojos bien abiertos.