El celular contra el cigarrillo

 Ya es conocido eso de que los celulares causarían cáncer, y gracias a dicha afirmación (aunque no totalmente probada) muchos han sostenido que iban a dejar de utilizar el celular con tanta frecuencia. La realidad es que en la era tecnológica en la que nos toca vivir, no tener celular, o bien tenerlo y no usarlo, es una incomodidad para el resto de la gente que sí tiene teléfono móvil y no concibe otra forma para comunicarse instantáneamente que no sea el uso de esos artefactos electrónicos que cada vez parecen evolucionar más rápido. La mencionada evolución es casi proporcional al decrecimiento del tamaño.

 Pero aquí estoy yo para informarles que el celular, ese supuesto productor de cáncer, puede ayudar a dejar de fumar. Suena loquísimo, y más en el contexto que ahora se torna contradictorio. Por un lado, cáncer; por el otro, ayudar a los fumadores a dejar ese mal hábito, lo cual a largo plazo sería prevenir el cáncer, aunque sea solamente el producido por el cigarrillo.

 Estudios recientes han demostrado que mensajes de texto “de ayuda” pueden duplicar la posibilidad de que un fumador logre dejar el cigarrillo. Si bien las cifras con las que dieron estos investigadores británicos no son enormes, es un buen comienzo. La investigación analizó a 5800 fumadores, 2915 de los cuales recibieron mensajes de texto alentándolos a dejar de fumar y luego a aguantar sin tocar el cigarrillo. El resto de las personas a las que se estudió solo recibió notas de agradecimiento por formar parte de la investigación.

 El procedimiento, que duró seis meses, fue el siguiente: se les envió cinco mensajes diarios durante las primeras cinco semanas y luego tres a la semana hasta concluir la investigación. Los participantes podían responder a los mensajes pidiendo consejos o bien, informando que habían tenido una recaída. Los mensajes que se les mandaba, entre otros, eran:

“¡Este es el día! Tire a la basura todos sus cigarrillos. Hoy es el comienzo del FIN, ¡usted puede hacerlo!”.

“¡Resultado rápido! ¡El monóxido de carbono ha salido de su cuerpo!”.

“Día 4 = un gran día. La ansiedad continúa, pero mañana será más fácil. ¡Mantenga su mente y sus manos ocupadas!”.

“Las ansias duran menos de 5 minutos en promedio. Para ayudar a distraerse, pruebe tomar algo lentamente hasta que el deseo desaparezca”.

“No se sienta mal o culpable si ha tenido una recaída. Ha logrado mucho hasta ahora. Las recaídas forman parte del proceso de dejar de fumar. Siga adelante, ¡usted puede hacerlo!”.

 Después de los seis meses, el 10,7% de quienes recibieron los mensajes de texto habían dejado de fumar, contra el 4,9% de los que no habían recibido los mensajes motivacionales. No son números extraordinarios pero aún así el número duplica a los participantes que no fueron estimulados.

 Caroline Free, a cargo de la prueba realizada (denominada “txt2stop”) en la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres, dijo que los mensajes de texto son una forma muy conveniente para que los fumadores sean asistidos para dejar de fumar. Además, informó que los participantes describieron al “txt2stop” como un amigo que los alentaba, o incluso como un ángel protector. En pocas palabras, ayudó a la gente a resistir la tentación de fumar. Free agregó que si se continúa trabajando con el proyecto se podría lograr, sin ninguna duda, una mayor efectividad.

 El CDC (Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades) sostuvo que dejar de fumar puede necesitar varios intentos pero que parar aunque sea por un relativamente breve lapso de tiempo ayuda mucho. Dos o tres semanas sin fumar reduce considerablemente el riesgo de ataques cardíacos y los pulmones vuelven a funcionar con casi total normalidad.

 La OMS asegura que cerca de seis millones de personas mueren cada año a causa del hábito de fumar, sobre todo en los países de bajos y medianos ingresos.

 El estudio, publicado en el diario médico británico “The Lancet”, pidió que los mensajes de texto fuesen incluidos entre aquellos servicios que ayudan a la gente a dejar el cigarrillo. También se ha sugerido que mensajes similares podrían utilizarse para ayudar a las personas a modificar otros comportamientos.

 Si bien no hay una única forma para ayudar a todo el mundo, la iniciativa me parece buena. Es una manera de utilizar la tecnología de la comunicación para ayudar a la gente.