Roberto Carlos discriminado

No queriendo acotar nada relacionado con la situación actual de los equipos que juegan la promoción, porque ineludiblemente simpatizo en estas instancias por Belgrano de Córdoba (para que mande a River a la B) y por Gimnasia de La Plata (porque está el mellizo), me voy a referir pura y exclusivamente a un episodio que aconteció recientemente en el fútbol ruso.

Sin lugar a dudas es un severo caso de discriminación y además de violencia. Y cuando digo violencia no me refiero a la violencia física, sino a otra clase de la misma, la violencia psíquica. ¿Cuál de las dos hace más daño? La respuesta es discutible.
El hecho ocurrió a mitad de semana casi al final de un partido disputado por los equipos Anzhi Makhachkala (en el que juega el ídolo brasilero) y Krylya Sovetov, en el cual el primero ganaba 3 a 0. En un momento, algún desubicado le tiró una banana al defensor y capitán del equipo. Acto seguido, el hombre que supo convertir un golaso inolvidable y mágico de tiro libre ante Francia, arrojó la banana fuera del campo de juego para después abandonar el partido al borde de las lágrimas. Todo esto es más apreciable en el video que está al final. 
Está bien, podrán decir que esto no se compara con el hecho de entrar a la cancha y amenazar a los jugadores, como lo hicieron ciertos inadaptados de River... pero yo creo que el efecto al que se llega es el mismo o incluso peor. Ya es la segunda vez que lo tratan de esa manera a Roberto Carlos, que no se merece algo semejante. A mi parecer hizo bien en dejar planteado que si le hacen de nuevo lo mismo dejaría de jugar. Sí, sé que tiene sus años ya, pero si se tiene la posibilidad de seguir viéndolo jugar, aunque sea en un fútbol poco trascendente (comparado con otros), no veo por qué apurar su retiro.
Sinceramente, da verguenza lo que hace cierta gente. Ensucian un buen deporte.


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